La madurez sexual como especie es algo que desconoce

La madurez sexual como especie es algo que desconoce quien se deja influenciar por lo que les han dicho que es, ya que esa óptica mira a través del ego, que es el compendio de ideas creadas en cada individuo de forma semejante, pero en cada ser distintas y que lo llevan a buscar en la vida distintos objetivos y roles limitados.

Un ser que madura interior y exteriormente como cualquier otra especie animal, también madura sexualmente. Un macho busca una hembra; y una hembra un macho. "Macho" que significa un hombre maduro física y mentalmente, nada que ver con "machismo". "Hembra" que de igual manera madura física y mentalmente para formar un territorio, como lo hacen los mamíferos semejantes al hombre. Madurar es un proceso complicado llevar a cabo en cautiverio, pero no imposible. Una hembra siente la necesidad de formar un territorio con un macho, pero no por fundamentos del ego, sino porque así lo siente instintivamente, está preparada para ello. La hembra elige siempre al macho más fuerte, más maduro.

Hoy en día las relaciones humanas buscan roles de dependencia, apego, codependencia y no son más que reflejos de nostros mismos. Siempre elegimos una pareja exactamente igual a nosotros, por lo regular semejante al ego. Siendo nuestro principal reflejo esa pareja que decimos odiar, amar o necesitar, porque al final esa pareja es lo que nosotros somos en el reflejo de eso que queremos recibir del otro, darnos a nosotros mismos.

No podemos escapar de nuestra naturaleza, pero en ella es donde encontramos la libertad.

Pejecita Amor
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