viernes, 15 de enero de 2016

La Vida, el terreno más obvio a la cercanía del ser

La Vida, el terreno más obvio a la cercanía del ser que tenemos y a la vez lo más alejado que nos condena al cautiverio de nuestra naturaleza. Dormir en el sueño de la ilusión de muerte, olvidar lo obvio. Ignorar, no reconocer lo que es, lo que somos, lo que fluye y late dentro y fuera como un reflejo que conecta con la sincronía de cada vivencia.

Naturaleza, fuente divina de ser, de perfección que conecta con los divino, con lo que tanto busca el hombre en las religiones, pero que la realidad es que está dentro, muy dentro. Cerca, muy cerca, tan cerca que no se percibe como el hecho de que nosotros mismos no nos miramos, solamente somos espectadores de la vida. Cuanta ignorancia de nosotros, cuantos temores infundados y esquemas limitados en neustras palabras y acciones que limitan el sublime sentimiento que conecta con lo que verdaderamente somos... Vida.

Vida no soy yo solamente, eres tú, son los pájaros, es el aire, el agua, las plantas. Vida no es lo que soy cuando pienso, sino cuando me convierto en amor que alimenta la Vida y crea, da, recuerda y sincroniza perfectamente fluyendo en la congruencia total de la energía de la Vida que es la sola existencia del todo en mi.

Pejecita Amor
www.facebook.com/PejecitaAmor

No hay comentarios:

Publicar un comentario